Cada vez más propietarios se hacen la misma pregunta: ¿y si ha llegado el momento de dejar la ciudad y empezar una nueva etapa fuera del centro? Vivir con más espacio, respirar aire limpio, desconectar del ruido constante… Suena bien, ¿verdad? Pero detrás de esa decisión hay un proceso importante que empieza con una operación clave: vender bien tu actual vivienda.
Si estás en esa etapa vital en la que la ciudad ya no encaja contigo como antes, este artículo es para ti. Aquí te contamos cómo dar el paso con seguridad, planificación y sin sorpresas.
¿Por qué cada vez más personas hacen este cambio?
No es solo por el teletrabajo o el precio del metro cuadrado. Cada vez más propietarios optan por dejar la ciudad en busca de calma, naturaleza y espacio. Según datos del INE, en 2022 más de 81.000 personas se mudaron desde capitales de provincia a municipios más pequeños, una tendencia que sigue al alza. Además, el valor medio del suelo urbano en zonas rurales o de menor densidad puede ser hasta un 50 % más bajo que en grandes ciudades, según el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana. Para muchos adultos, la prioridad ha cambiado: menos ruido, más vida.
Vende con estrategia, no con prisa
Antes de mirar casas con jardín, necesitas cerrar bien la etapa actual. Y eso empieza por una venta bien planificada. Aquí algunos consejos clave:
Valora correctamente tu vivienda urbana. No pongas un precio emocional, sino uno realista, adaptado al mercado actual. Un asesor profesional puede ayudarte a fijarlo sin perder oportunidades.
Prepárala para destacar. Despersonalizar, mejorar la luz, hacer pequeñas reparaciones… Todo cuenta. Una vivienda bien presentada se vende antes y a mejor precio.
Ten claros los plazos. Si vas a comprar fuera, necesitas sincronizar bien ambos procesos. Una venta rápida puede ponerte en una mejor posición para negociar tu nueva compra.